Notas

Sugerencias sobre un cuchillo

Sugerencias sobre un cuchillo

El cuchillo es una herramienta y como tal requiere de un uso y cuidado acordes con lo que se espera de su rendimiento y duración.

Usted puede disfrutar del uso de un buen cuchillo por muchos años con sólo dedicarle un poco de cuidado.

Es un placer sentir el corte con un cuchillo en óptimas condiciones.

No será muy sacrificado si es que lo quiere y le tiene un poco de cariño.

No se lo preste a nadie aunque lo crean egoísta, si corta bien, es, entre otras cosas por no prestarlo.

No lo envaine sucio o húmedo, los restos de comida y otras substancias tienen sales y ácidos que se instalarán definitivamente en la vaina para corroer la hoja mientras está guardada.

Lávelo con lo que quiera, aún con agua caliente y detergente o jabón, aunque será suficiente con limpiarlo de punta a punta con una servilleta de papel o tela humedecida con cualquier liquido limpio (agua, soda, gaseosa, vino, etc.) Lo de las bacterias y microbios es otro tema.

Esta recomendación vale también para los cuchillos llamados inoxidables, puesto que “un buen cuchillo inoxidable” no será realmente inoxidable, sólo tendrá buena o mediana resistencia a la corrosión y es necesario limpiarlo bien antes de envainar.

Si es de acero oxidable, sugiero lubricarlo con algún preservante confiable cuando esté limpio y seco antes de guardarlo en su vaina.

Corte únicamente sobre madera o material sintético blando (plástico), dañará su filo cortando sobre mármol, platos, parrilla, etc.

No haga palanca con la punta del cuchillo ya que éste no es una barreta, un abridor de tarros de pintura, o atornillador o destornillador.

Para recuperar el filo, que al fin nada es eterno, bastará con una piedra de asentar no muy dura, de grano medio, que puede ser una Arkansas (la mejor de las naturales), de cerámica o de polvo de diamantes.

Apoye la hoja con el ángulo del filo (10º por lado aprox.) y pasee todo el largo de la hoja por toda la superficie de la piedra, sin presionar mucho y con un buen lubricante (WD-40 es lo mejor que conozco), haciendo todos los movimientos posibles, en círculos, diagonales en ambos sentidos u ochos, lo que prefiera.

Una chaira de acero de estrías finas, de cerámica o polvo de diamantes también dará buenos resultados, pero se requiere cierta habilidad.

Si no lo logra venga a verme que le explico personalmente.

Y por favor… no destruya la excelente carne Argentina con esos serruchos a los que llaman cuchillo, no se deje convencer por la publicidad infame y canalla.

Un buen cuchillo es para toda la vida, o más y, un cuchillo valioso no es “caro”; puede ser una buena inversión.

Finalmente… cada uno tiene el cuchillo que merece.

Alfredo Kehiayan